ME GUSTA "INLAND", ME GUSTA "EMPIRE"

Vista en varios festivales europeos y estrenada en algunas ciudades de los USA, INLAND EMPIRE (así, siempre en mayúsculas), lo último de David Lynch, sigue sin fecha de estreno en España. Por lo que sabemos, la película, de casi tres horas de duración, lleva al extremo la concepción narrativa y el gusto por la atmósfera de su autor y se libera al cien por cien de las ataduras de la industria. Dicha liberación ha sido posible gracias al enamoramiento visceral que Lynch está viviendo con el vídeo digital. Una técnica más flexible, capaz de proporcionarle cientos de horas grabadas y, sobre todo, mucho más barata que el pesado rodaje en 35mm. El resultado, no apto ni siquiera para muchos de sus seguidores, ha provocado la negativa de muchas distribuidoras a proporcionarle un estreno normalizado y ha sido el propio Lynch el que se está encargando de su limitada distribución en USA.

El origen del proyecto nace del inmediato flechazo que Lynch siente hacia las palabras INLAND EMPIRE ("me gusta INLAND, me gusta EMPIRE"), salidas de labios de Laura Dern en una conversación de sobremesa en la que Laura le explicaba a Lynch que su marido procede de esa zona situada al este del condado de Los Ángeles. Por lo demás, desconocemos la premisa de la película porque queremos llegar vírgenes a su estreno (ejem!). A destacar un reparto muy lynchiano, con caras habituales en su cine como la de la gran Grace Zabriskie, Harry Dean Stanton, Justin Theroux, Diane Ladd y la propia Laura Dern, a los que hay que sumar gratas incorporaciones como la de Jeremy Irons o Julia Ormond.

Como colofón, el trailer francés de INLAND EMPIRE, también conocido como "el trailer que David Lynch no quiere que vean sus fans USA".