miércoles, abril 18, 2007

WONDER WOMAN Y LO CAMP

Starring Lynda Carter as Wonder Woman

No es un modo natural de sensibilidad, suponiendo que tal cosa exista. Es más, la esencia de lo camp es el amor a lo no natural: al artificio y la exageración. Y lo camp es esotérico: tiene algo de código privado, de símbolo de identidad incluso, entre pequeños círculos urbanos.
Son palabras de Susan Sontag extraídas de su fundacional artículo Notas sobre lo camp (1964). Y, de entre las muchas distinciones que hace de este fenómeno, destacamos la diferenciación que establece entre lo camp ingenuo y lo deliberadamente camp. Sobre el primer tipo dice: En lo camp ingenuo, o puro, el elemento esencial es la seriedad, una seriedad que fracasa. Desde luego, no toda seriedad que fracasa puede ser reivindicada como camp. Sólo aquella que contiene la mezcla adecuada de lo exagerado, lo fantástico, lo apasionado y lo ingenuo.

Todo esto nos viene a la cabeza por la explosión camp que vivimos el otro día cuando zapeando de madrugada tropezamos con el capítulo piloto de Wonder Woman. Algo tan sensacional, colorista e ingenuo parece cosa del pasado.

¡ZAS! ¡BOOM! ¡CRASH!

A partir de los años sesenta, cuando empieza a hablarse sobre lo camp, se pueden ver en televisión series cien por cien camp como Batman (1966-68) o como Wonder Woman (1976-1979). Es un periodo fértil para este tipo de experiencias y de hecho parece que a medida que nos acercamos al siglo XXI lo camp pierde su pureza e ingenuidad. Por ejemplo, no podemos hablar de la Troma como algo camp: sus películas no son camp, sino que juegan a ser camp. Y eso no cuenta.


Nos cuesta creer que sigan produciéndose manifestaciones de lo camp tan candorosas y modélicas como las que despliega Wonder Woman con su lazo mágico y su estrafalaria transformación de gris oficinista en la Mujer Maravilla (no perderse el youtube de ahí abajo). Aunque esto no significa necesariamente que lo camp esté en extinción o desuso. Por un lado, ya advertía Susan Sontag que el canon del camp puede cambiar, depende en gran medida del tiempo, del paso del tiempo. Cosas que hoy no sabemos cómo catalogar nos parecerán camp dentro de treinta años.

El polígrafo dice que... es camp

Porque, en última instancia, el camp no es una moda pasajera, es una sensibilidad, una manera de ver las cosas, quizá sea el invento o subterfugio de un intelectual para gozar sin complejos de los grandes momentos que la cultura popular guarda en su trastienda, o quizá es simplemente el cosquilleo que sentimos cuando vemos a Lynda Carter dar vueltas sobre sí misma al ralentí, en plena trashformación en Wonder Woman, con su ropa de oficinista en una percha, suspendida en su antebrazo. Eso sí es camp del bueno.

Notas sobre sobre lo camp está incluído en el libro de Susan Sontag Contra la interpretación, editado en España por Ed. Alfaguara.




5 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo estuve muchos años enamoradísimo de Lynda Carter.

She can communicate with birds.

http://www.youtube.com/watch?v=ekBqgJqXFss

manolobangbang dijo...

Lo sospechaba, unabomber, he oído rumores de que tienes las primeras temporadas de Wonder Woman en DVD. Qué envidia. Me rindo a los encantos de Lynda Carter y, por cierto, el youtube de She Can communicate with birds, a eso, yo lo llamo poesía.

Anónimo dijo...

Te dejo mis DVDs cuando quieras. Son lo más.

El Hombre Confuso dijo...

Ay, qué apañada la Wonder Woman!! Como se nota que es una superheroe, yo doy esas vueltas y termino en el suelo, mareado y sin haberme quitao ni la camisa!!

Alfredo dijo...

increible la cintura de esa mujer, me pregunto si encontrare el libro de la susan sontag por aca, trabajo sobre un ensayo suyo de ese libro ...